La agresión a un arqueólogo desencadena protestas en Grecia
ATENAS, Grecia (AP) – Los arqueólogos estatales de Grecia iniciaron el martes una huelga en protesta por la agresión sufrida por un arqueólogo responsable de la isla turística de Mykonos, un ataque que, según ellos, podría estar relacionado con presiones comerciales para ampliar el desarrollo turístico.
Manolis Psarros, empleado del servicio arqueológico estatal, fue golpeado por un hombre no identificado con un posible cómplice en Atenas la semana pasada y quedó inconsciente y sangrando en la calle. El hombre, de 53 años, fue trasladado a un hospital público de la capital griega y actualmente se recupera en su domicilio.
Arqueólogos empleados por el Ministerio de Cultura protagonizaron un paro laboral de cinco horas para protestar por lo que su asociación describió como un “ataque mafioso.”
Despina Koutsoumba, responsable de la asociación de arqueólogos manifestantes, dijo que Psarros se había ocupado de múltiples casos de supuestas violaciones en Mykonos y que en el pasado había sido llamado como testigo en juicios derivados de esos casos.
“No tiene problemas en su vida personal -deudas ni nada parecido- que justifiquen algo así. Se trata de un ataque profesional”, declaró Koutsoumba a The Associated Press.
“Le golpearon por detrás antes de entrar en su coche. Perdió el conocimiento y fue golpeado después. Tiene costillas rotas y muchas contusiones”.
A la protesta se unieron empleados del ministerio en Atenas, así como la Asociación nacional de Conservadores Arqueológicos. Piden más protección policial para los funcionarios públicos que participen en inspecciones polémicas y se negarán a tratar casos de Mykonos hasta finales de mes, cuando tienen previsto visitar la isla.
En Grecia, los permisos urbanísticos suelen estar sujetos al veto del servicio arqueológico local, encargado de proteger el patrimonio antiguo del país.
Mykonos, uno de los destinos turísticos más conocidos de Grecia, se asentó en la antigüedad y alberga un museo arqueológico. Está situada junto a la diminuta y deshabitada isla de Delos, un antiguo centro comercial, religioso y político considerado uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de Grecia.
“Hay problemas causados por el alto nivel de desarrollo turístico en muchas islas, pero Mykonos es con diferencia la peor”, dijo Koutsoumba.
El Ministerio de Cultura condenó la agresión, mientras que el alcalde de Mykonos, Constantinos Koukas, describió la paliza como un “ataque criminal y descarado que nos ha conmocionado a todos.”